RIESGOS EMOCIONALES QUE PRODUCE LA ACTIVIDAD SEXUAL A TEMPRANA EDAD

Con frecuencia las personas creen que los únicos riesgos que enfrentan los adolescentes al tener sexo son el embarazo y el contagio por una ETS. En realidad no es así. Los adolescentes que tienen sexo también tienen riesgo de sufrir problemas emocionales.  
Se sabe con certeza, desde hace mucho tiempo, que el sexo en los adolescentes y los problemas emocionales tales como la depresión son aspectos relacionados. Lo que no se sabe a ciencia cierta es si el sexo en la adolescencia causa depresión o si la depresión hace que los adolescentes tengan sexo. La investigación reciente en este ámbito sugiere que ambas posibilidades pueden ser ciertas. Los adolescentes, en particular las jóvenes adolescentes que tienen relaciones sexuales, pueden tener mayor riesgo de sufrir de depresión. Además, actualmente se sabe que la depresión en los adolescentes conduce a conductas sexuales arriesgadas.
Un estudio realizado en el año 2005 recomienda que las jóvenes adolescentes que hayan tenido sexo se hagan una prueba para saber si tienen depresión. Este artículo publicado señala que las adolescentes que tienen sexo, usan drogas y/o comienzan a beber alcohol, tienen una probabilidad tres veces mayor de sufrir de depresión un año después, comparado con las adolescentes que no asumen estos riesgos.
Los investigadores concluyeron que en los jóvenes de sexo masculino las cosas son un poco distintas. Es más probable que los jóvenes que tienen conductas poco saludables, como fumar cigarrillos todos los días, fumar marihuana y beber alcohol, ya estén deprimidos.
En otro estudio, el que utilizó datos de esa misma encuesta de adolescentes, se intentó averiguar si la depresión predice la conducta sexual arriesgada. Los investigadores concluyeron que los adolescentes, hombres y mujeres, que tienen síntomas de depresión tienen mayor probabilidad de involucrarse en conductas sexuales altamente arriesgadas, tales como no usar condones, tener sexo con muchas parejas, y usar alcohol u otras drogas cuando se involucraban en actividades sexuales.

¿COMO AYUDAR A SUS  A PREPARARSE PARA UN FUTURO?

Hay dos preguntas que todos los adolescentes se formulan a sí mismos: ¿Quién soy? ¿Qué quiero hacer? Como padres de familia pueden ayudar a sus hijos a responder estas preguntas.
Primero, puede ayudarlos a formar sus propios valores. Pueden conversar sobre los valores suyos y por qué son importantes. Puede exponer a sus hijos a cimientos religiosos y espirituales.
Encuentre suficientes oportunidades para hablar sobre los valores y el carácter. Inicie el diálogo preguntándoles, por ejemplo, sobre algo que alguien hizo en una película o en un programa de televisión.
Segundo, ayúdelos a identificar sus propias metas. ¿Quieren asistir a la universidad o a una escuela de preparación técnica luego de terminar la escuela secundaria, o encontrar un empleo? ¿Hay algo que le encante hacer a su hijo o hija? Usted puede ayudarlos a saber cómo eso puede conducir a un empleo en un futuro.
Ayúdelos a fijarse metas a corto y largo plazo. Las metas a corto plazo incluyen cosas como “saca buenas notas este semestre” o “toma un curso de diseño en el verano”. Las metas a largo plazo pueden incluir graduarse de high school, asistir a la universidad o a una escuela de preparación técnica, encontrar un empleo dentro de un cierto campo, y casarse.
Ayúdelos a comprender que las decisiones que tome hoy pueden marcar una diferencia en su futuro. Cite algunos ejemplos. Por ejemplo, el quedar embarazada o dejar embarazada a una chica podría cambiar su vida para siempre. Por otra parte, tener un buen rendimiento en la escuela hoy significa que tendrá muchas opciones después de salir de la escuela, y eso puede significar un mejor trabajo cuando sea adulto.